Una familia de este apellido hubo en Jerez de la Frontera, y de ella fué Diego de A., que pasó a Antioquía, departamento de Colombia. Casó dos veces, pero no dejó descendencia. Sábese que otro de este apellido, llamado Luis A., se estableció también en Antioquía, pero se desconocen sus ascendientes. Casó con doña Isabel Gómez de Ayala, y de este matrimonio proceden los A. que hay en Antioquía. Por referencias de historiadores de la época y otras averiguadas por Araldis en los archivos registrales de ciudades y otros privados, podríamos afirmar, pero no asegurar, que este escudo u otro muy similar a él, apareció inicialmente desde el siglo XI al XIV, particularmente en las celebraciones de 1221 con motivo de la colocación de la primera piedra de la Catedral de Burgos por D. Fernando, rey de Castilla llamado el Santo. Todo ello parece coincidir con la memoria familiar de algunos de los miembros de la rama de la familia ||#$||. Son sus armas: Cuartelado: primero, de azur, con un castillo de oro; segundo, de oro, con una estrella de sinople; tercero, con un brazo armado, moviente del flanco siniestro, y con la mano apoyada en un palo, que llega hasta la punta del escudo; del centro de este cuartel salen llamas que envuelven parte del brazo y del palo, y cuarto, de plata y un hombre con espada y broquel, luchando con un león, que tiene las manos puestas en el broquel. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia A., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales, pues la inclusión del elemento castillo es la característica del dominio feudal, pertenecientes a familias con memoria anterior al siglo XI, es símbolo de autoridad, gobierno y protección. Los esmaltes del arma de los A. pregonan los siguientes valores: el Azur corresponde al símbolo del agua, de la continuidad de la vida, es un color de nobleza, belleza, castidad y fidelidad, además otras virtudes caracterizaban a la familia, tales como la abundancia económica, la perseverancia, la suerte, la fama y el afán de victoria.